Los vientos mueven el aire por todo el planeta equilibrando la temperatura de la Tierra. Los fuertes vientos, como huracanes y tornados, ocurren cuando se juntan masas de aire caliente con aire frÃo. Como el aire caliente tiende a subir y el aire frÃo a bajar, este cambio de posición se puede producir de forma brusca y debido a la rotación de la tierra se forman remolinos de aire a gran velocidad que pueden ser muy destructivos. La mayor velocidad registrada fue de 371 Km/h. Los huracanes giran en sentido antihorario en el hemisferio Norte y en sentido horario en el hemisferio Sur.
Los nombres de los vientos.
El viento, tan presente como benéfico a veces o catastrófico en ocasiones, adquirió pronto diversas personificaciones; asÃ, Boreas fue la denominación para los vientos huracanados del Norte y Céfiro fue la cara amable de las suaves brisas del Sur. Poseidón, librando encarnizadas batallas con sus huestes de Tritones y Nereidas dio explicación a las tormentas y tempestades, de la misma manera que justificó los cálidos vientos y las suaves brisas. En un punto determinado del Mediterráneo debieron nacer, en hora incierta, las denominaciones de los puntos cardinales y también los nombres de los vientos intermedios. Los lugares por donde nace y muere el sol señalan, desde siempre, los puntos cardinales del Este y el Oeste. La posición del sol en su punto más alto del mediodÃa señala igualmente el eje Norte-Sur. Los vientos al soplar no coincidÃan siempre con los ejes geográficos principales, por lo que fue necesario identificar direcciones intermedias. Los nombres de Greco o Gregal, Siroco o Xaloc, Lebeche y Maestro o Mistral tomaron carta de naturaleza. Pero para que determinado viento sea identificado con una dirección dada es preciso partir de una localización pecisa. A pesar de no ser un viento intermedio, la Tramontana, equivalente del viento del Norte, toma su denominación de "más allá de los montes" y se aplica, haya o no una cadena montañosa, al norte. En Cataluña, la "Tramuntana" adquiere un significación especial, sobre todo en la costa gerundense y también en Baleares, concretamente en la isla de Menorca. Según se dice, es responsable principal tanto del "seny" como de la "rauxa", caracterÃsticas temperamentales asimilables al sentido común y a la fantasÃa.
El hálito de los dioses.
Hoy en dÃa, los vientos han perdido parte de su misterio al ser clasificados simplemente de térmicos o de gradiente, y un señor francés, un tal Beaufort, llegó a encasillarlos en una escala que mide su fuerza según los efectos observables de éste. Pero aún perduran las denominaciones clásicas y Greco y Siroco siguen vivos en el lenguaje marinero. A pesar de las bajas y las altas presiones, a pesar del fetch y tantos otros términos técnicos, los vientos siguen teniendo un gran tanto por ciento de poesÃa, algo del hálito de los dioses. Hoy en dÃa las denominaciones tales como Meltemi (viento de componente Norte que puede soplar con fuerza en las islas griegas), Simoun, Cierzo (bien conocido por los aragoneses), Tramontana y tantas otras siguen vigentes y obedecen a topografÃas locales que se engarzan en los vientos generales, y otras veces sustituyen o los suplantan. Una denominación particular de un viento dominante de la costa catalana y valenciana que nos recuerda nuestro pasado árabe merece nuestra atención; se trata del GarbÃ, soplando de 235º. Dicho suroeste conserva todavÃa la denominación de "oeste" en lengua árabe actual: Garb=Oeste. Viento que equivale al Embat de la BahÃa de Palma de Mallorca. Otros lugares bautizan a sus vientos con nombres tan sugerentes como Virazón, Terral, Lemosino, etc., poniendo de manifiesto que todavÃa en los albores del tercer milenio los vientos son algo más que la escueta definición del diccionario: "aire en movimiento".
Medición del viento.
Se utiliza, como ya se ha comentado, la escala de Beaufort, basada en los efectos observables que el viento produce, y que ideó el Almirante Beaufort allá por el año 1804.
Las velocidades de esta escala, se refieren (en un lugar llano y despejado)
a una altura tipo de 10 metros.
Escala Beaufort | m/s | Nudos | Km/h | Denominación | Estado del mar | Altura de las olas (metros) | Escala Douglass |
0 | 0Â -Â 0.2 | <Â 1 | 0Â -Â 2 | calma | Mar llana como un espejo. | 0 | Mar llana |
1 | 0.3 - 1.5 | 1 - 3 | 2 - 6 | ventolina | Pequeñas olas cortas que no llegan a romper | 0 - 0.1 | Mar rizada |
2 | 1.6 - 3.3 | 4 - 6 | 7 - 11 | brisa muy débil | idem | idem | idem |
3 | 3.4 - 5.4 | 7 - 10 | 12 - 19 | brisa débil / flojo | Las olas empiezan a romper, siendo bajas. | 0.1 - 0.5 | Marejadilla |
4 | 5.5Â -Â 7.9 | 11Â -Â 16 | 20Â -Â 29 | brisa moderada / bonacible | Olas bajas, algo largas. | 0.5Â -Â 1.25 | Marejada |
5 | 8.0Â -Â 10.7 | 17Â -Â 21 | 30Â -Â 39 | brisa fresca / fresquito | Olas largas. Algunos rociones. | 1.25Â -Â 2.5 | Fuerte marejada |
6 | 10.8Â -Â 13.8 | 22Â -Â 27 | 40Â -Â 50 | brisa fuerte / moderado | Grandes olas que rompen. Crestas blancas. Peligro para embarcaciones menores. | 2.5Â -Â 4 | Mar gruesa |
7 | 13.9 - 17.1 | 28 - 33 | 51 - 61 | viento fuerte / frescachón | Espuma longitudinal por el viento. | 4 - 6 | Mar muy gruesa |
8 | 17.2Â -Â 20.7 | 34Â -Â 40 | 62Â -Â 74 | viento duro / temporal | Olas altas que rompen. Espuma en bandas. | 6Â -Â 9 | Mar arbolada |
9 | 20.8Â -Â 24.4 | 41Â -Â 47 | 75Â -Â 87 | viento muy duro / temporal fuerte | Olas muy gruesas. El mar ruge. Mala visibilidad por rociones y espuma. | idem | idem |
10 | 24.5 - 28.4 | 48 - 55 | 88 - 101 | temporal / temporal duro | Olas muy gruesas. Superficie del mar blanca. El mar ruge intensamente. Espuma en el aire. | 9 - 14 | Mar montañosa |
11 | 28.5 - 32.6 | 56 - 63 | 102 - 117 | temporal muy duro / borrasca | Olas muy grandes. Mar blanca. Navegación imposible. | > 14 | Mar enorme |
12 | > 32.7 | > 64 | > 118 | temporal huracanado / huracán | Aire lleno de espuma y de rociones. Visibilidad casi nula. | idem | idem |
Cuando la dirección del viento oscila en más de 45º y no queda establecido se denomina:
Viento de componente Norte (entre 315° y 45°)
Viento de componente Este (entre 45° y 135°)
Viento de componente Sur (entre 135° y 225°)
Viento de componente Este (entre 225° y 315°)
Sectores (en grados sexagesimales) que corresponden a cada viento:
Viento del Norte o Tramontana (N) de 337.5° a 22.5°
Viento del Noreste o Gregal (NE) de 22.5° a 67.5°
Viento del Este o Levante (E) de 67.5° a 112.5°
Viento del Sureste o Xaloc (SE) de 112.5° a 157.5°
Viento del Sur o Mitgjorn (S) de 157.5° a 202.5°
Viento del Suroeste o Leveche o Garbà (SW) de 202.5° a 247.5°
Viento del Oeste o Poniente (W) de 247.5° a 292.5°
Viento del Noroeste o Mistral (NW) de 292.5° a 337.5°